Las autoridades francesas ven posible un ataque de la banda

Los dos mandos antiterroristas que testificaron ayer en el juicio contra 14 miembros del aparato logístico etarra no descartan que ETA decida atentar en territorio francés. "El Gobierno francés ha dicho siempre que el problema de ETA es español y no francés. Pero se ve bien que ETA y el movimiento de legales que rodea a ETA empuja al Gobierno francés a implicarse en este proceso", recalcó el jefe de la SDAT, Frederic Veaux.


Esa opinión fue refrendada por el jefe anti ETA de la SDAT, Jean Pargade. "ETA ha pedido al Gobierno francés que se implique y ha amenazado con extender la lucha armada al territorio nacional". Pargade hizo referencia a un documento incautado al etarra francés Didier Aguerre, en el que preconizaba "pasar a la acción y perpetrar acciones muy mediáticas" en Francia.

Los policías recordaron que de los 700 presos de la banda, 160 se encuentran en cárceles francesas, y evocaron las declaraciones efectuadas en el mismo juicio por Ignacio Esparza Luri el viernes. Éste emplazó a Francia a poner fin a su "estrategia deliberada de agravamiento de la situación" y le advirtió de que al "cerrar la puerta a una salida política" corre el riesgo de "prolongar y extender el conflicto" del País Vasco.

Fuentes de los servicios antiterroristas franceses han venido reiterando en las últimas semanas la posibilidad de que ETA ataque en Francia. Los etarras, desde hace dos años, no actúan de la misma forma en territorio francés, donde supuestamente han reforzado sus estructuras logísticas locales, mucho menos permeables.

Además, mientras hace un par de años, en caso de ser detectados, emprendían la huida sin enfrentamiento, ahora huyen a tiros o reducen a las fuerzas de seguridad galas. Ya lo hizo en noviembre de 2004 Alaitz Areitio, una de las supuestas integrantes del comando que robó las pistolas. En ese asalto fueron usados para maniatar a los rehenes los grilletes robados a dos gendarmes en marzo pasado, que fueron reducidos y abandonados desnudos.

La cuestión, dicen fuentes de Interior, es saber si los robos y la actividad etarra en Francia responden a una estrategia o son movimientos tácticos. Es decir, si ETA mantiene la decisión estratégica de abandonar la violencia, pero por puro funcionamiento sigue trabajando, o si, por el contrario, esta actividad entra dentro de una estrategia tendente al regreso. Todas las fuentes coinciden, sin datos confirmables, que subsisten las tensiones en el seno de ETA entre quienes creen que la lucha armada está agotada como vía y quienes sostienen que si el Gobierno español no se mueve eso supondría una traición que justificaría la vuelta del terror.

Fuente: El País