Varios académicos de la RAE leen la cartilla a Zapatero

La propuesta que el pasado sábado, coincidiendo con la celebración del Día Internacional de los Discapacitados, hizo el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, no ha tenido el efecto esperado. Desde la Real Academia Española de la Lengua (RAE) algunas voces han criticado este cambio, que supondría una reforma del artículo 49 de la Constitución.Lo que para el presidente y también para el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, responde a un cambio "ético" que da respuesta a las reivindicaciones del colectivo, para algunos académicos no resulta necesario e incluso podría llegar a ser contraproducente ya que el término "discapacitado" –dice- es incluso "más negativo" que el de "disminuido.
Así lo cree Valentín García Yebra, que aclara que el término "disminuido implica tener rebajadas las capacidades, mientras que discapacitado significa no tener ninguna capacidad", tal y como figura en el diccionario de la RAE.De la misma manera se han manifestado académicos como Gregorio Salvador, que advierte además que "la realidad no se cambia con las palabras" y pone como ejemplo los términos "invidente" y "ciego". También Manuel Seco, que no ve diferencia entre ambos términos, ya que en ambos casos se trata de un "eufemismo".Otro académico que ha echado por tierra la propuesta de Zapatero es Francisco Rico, uno de los principales expertos en El Quijote, que aboga por "no tocarlo" ya que de modificarse, el término "discapacitado" cobrará también un sentido peyorativo en el futuro, prevé.

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NdR: Ay Rodríguez, mira que querer reformar la Constitución para que tú estés definido en ella...¿No será un exceso de megalomanía?